jueves, 19 de abril de 2007

Fútbol con historia (1)

Adrián Egea

LIVERPOOL-EVERTON
EL HONOR DE LA RIVERA DEL MERSEY

En esta sección se hablará de los derbis (o clásicos) futbolísticos más destacados del panorama mundial. Para empezar, en este primer número de GÉNESIS comentaremos la historia y evolución de uno de los partidos más vibrantes de la Premier League inglesa, el Liverpool-Everton.

Los inicios de la rivalidad

El Everton se fundó en la ciudad de Liverpool en el año 1878. Con su vestimenta azul y blanca era entonces el único equipo que defendía la ciudad del río Mersey. El presidente fundador del Everton, John Houlding, era uno de los concejales del ayuntamiento de la ciudad (aunque más tarde pasaría a ser el alcalde) y uno de los destacados fundadores de la liga inglesa. Houlding, a pesar de los buenos inicios del club, no tenía buenas relaciones con la directiva del club, por lo que en 1982, él, tres jugadores y unos treinta socios decidieron desvincularse del Everton y crear un nuevo club, el que actualmente conocemos como Liverpool. Es decir, que el Liverpool se creo como una escisión del Everton aunque cueste creerlo. Los inicios del Liverpool no fueron fáciles ya que no contaban con suficientes recursos económicos y la búsqueda de jugadores fue difícil, tanto que como último recurso el equipo se dirigió a Escocia a realizar una gira para encontrar buenos talentos. Allí encontró ocho futbolistas con los que pudo completar su equipo e iniciar su andadura. La ciudad de Liverpool contaba ahora con dos equipos de fútbol, por lo que el honor por ser el mejor equipo de la ciudad estaba en juego. El Everton se trasladó a un estadio lujoso y moderno, Goodison Park, dejándole a su rival un estadio viejo y vacío que, con el paso del tiempo, se llamaría Anfield Road, tal como lo conocemos hoy.

Grande y modesto

En los inicios de estos dos clubes, el Everton era el club grande de la ciudad, mientras que el Liverpool era considerado el equipo ‘pequeño’ o, más bien, ‘modesto’. Actualmente la situación es muy distinta: ahora el Liverpool es el ‘grande’ y el Everton es el ‘segundón’, pero no por ello los partidos entre ellos dejan de ser apasionantes.

Este cambio de papeles entre ellos no tuvo lugar definitivamente hasta los años setenta y ochenta, cuando el Liverpool, con su característica vestimenta roja, consiguió cuatro copas de Europa y se convirtió en el mejor equipo del momento. A estos cuatro galardones hay que añadir dos copas de la UEFA (1973 y 1976), una Supercopa de Europa (1977), diez ligas (1973, 1976, 1977, 1979, 1980, 1982, 1983, 1984, 1986, 1988 y 1990), tres Copas de Inglaterra (1974, 1986, y 1989), cuatro Copas de la Liga (entre 1981 y 1984) y diez Charity Shields (1976, 1977, 1979, 1980, 1982, 1986, 1988, 1989 y 1990). En aquel equipo mítico brillaban glorias del fútbol como Callaghan, Hughes, Dlaglish, Rush, Johnson, Souness o Grobbelaar. Con la retirada de sus mejores futbolistas, la estrella del Liverpool se fue apagando durante la década de los noventa, aunque ahora parece estar resurgiendo.

El Everton también vivió su época de gloria, aunque con menos trascendencia a nivel mundial, cuando a finales de los ochenta consiguió ganar dos Ligas (1985 y 1987), una Copa de Inglaterra (1984) y tres Charity Shields (1984, 1985 y 1987).
Buena sintonía entre las aficiones

En cualquier partido considerado ‘derbi’ o ‘clásico’, todos sabemos que se realizan grandes despliegues policiales en los estadios para garantizar seguridad y evitar altercados entre las aficiones. Pero, curiosamente, esto no ocurre en los partidos entre el Liverpool y el Everton. Bajo el lema “Liverpool es demasiado pequeño para llevarse mal con los vecinos” se ha creado un ‘vínculo de afecto’ entre las aficiones de ambos equipos. Esta unión tuvo sus inicios en las tragedias de Heysel y Hillsbrough. Dos estadios en los que tuvieron lugar dos sucesos lamentables en la historia del fútbol. En estos dos estadios sucedieron sendas avalanchas en las que murieron muchos seguidores del Liverpool. Este trágico suceso unió a las aficiones del Everton y el Liverpool, creando lo que hasta hoy se ha conocido como un ‘vinculo de afecto’ entre estas dos hinchadas. Por ello, los ‘derbis’ entre estos dos equipos se caracterizan por la deportividad con la que transcurren y la pasión con la que se vive este encuentro.




2 comentarios:

Anónimo dijo...

you`ll never walk alone

Anónimo dijo...

Adripan, adripan... que el fútbol te tira mucho!! Ya estás publicando hasta en un diario digital, ñas!

Sabes quién soy? Si no, me decepcionarás eh? Pero como soy buena, te voy a dar una pista sutil, tan sutil como yo...

Las postales pueden ser recuerdos maravillosos de viajes sorprendentes ^^ xDDDDDDDDD

Besitos neneh!!